Entre el 2 y 3 de octubre se registraron distintos sismos en el país y Jujuy estuvo entre las provincias afectadas. El 3 de octubre a la 1:26 se produjo un temblor de magnitud 3.1 con una profundidad de 251 kilómetros. Un día antes, el 2 de octubre a las 9:39, se reportó otro movimiento de 2.9 grados a 212 kilómetros de profundidad. Ambos fueron leves y sin consecuencias materiales ni personales, aunque confirman que la región continúa dentro de un área con actividad sísmica frecuente.
El escenario nacional también mostró actividad en otros puntos. En San Juan se registraron movimientos entre 2.5 y 3.2 grados, mientras que en Mendoza los temblores oscilaron entre 2.7 y 3.0. En La Rioja se destacó un sismo de 2.9 grados y otro más superficial de 2.6 grados, ocurrido a solo 28 kilómetros de profundidad. En Santiago del Estero se detectó un temblor más intenso, de 5.8 grados, aunque con una profundidad de 588 kilómetros, lo que redujo su impacto en la superficie.
Los especialistas remarcan que, aunque muchos de estos temblores son poco perceptibles, la prevención resulta esencial. En caso de un movimiento sísmico, se recomienda mantener la calma, alejarse de vidrios y objetos que puedan caer, y refugiarse en espacios seguros, como debajo de una mesa firme o junto a paredes estructurales. Si se está en el exterior, lo mejor es alejarse de postes, árboles o construcciones inestables.
Otra medida importante es tener un plan familiar de emergencia, además de una mochila con elementos básicos como agua, linterna, botiquín y radio. También se aconseja identificar salidas de emergencia en el hogar, escuela o trabajo. Estar preparados e informados es fundamental para reducir riesgos frente a un fenómeno natural que, aunque muchas veces leve, es propio de provincias como Jujuy, San Juan, Mendoza y varias regiones del país.